martes, 26 de noviembre de 2013

LA SALVACIÓN, UN TEMA ATEO Y NO ATEO




Fanatismo: es una pasión exacerbada e irracional hacia algo. 

Las personas necesitamos creer en algo; lo dice la historia. Todas las civilizaciones más antiguas parten de un concepto religioso de creación de las cosas. Pasan los siglos llegamos hasta nuestros días, donde la ciencia explica lo que antes era un misterio y “cosa de Dios”, entonces el concepto de una deidad se hace menos necesario porque hemos podido desenmarañar “sus misterios” y encontramos... En primera; que se pueden desenmarañar; y en segunda, que todo tiene una explicación lógica; sepamos cuál es o no, todo tiene una explicación lógica porque hasta ahora, la gran mayoría de cosas lo ha tenido, por lo tanto, las que desconocemos, la tendrán. Así que llegamos a un silogismo: Como todo lo que hemos comprendido hasta el día de hoy es comprensible, entonces lo que no comprendemos hoy, lo será cuando lo comprendamos mañana. Sonará muy tonto a primera vista, pero en realidad sí tiene sentido. Lo malo de este silogismo es que es absolutista y se comprueba a sí mismo; es como ser juez y parte; y personalmente nunca me he sentido muy cómodo con los absolutos; pero esto último es solo mi opinión.

Hay quienes creen en la existencia de una deidad y hay quienes no. Los que creen quisieran que los que no creen crean para que se salven, y los que no creen, quieren que los que creen no crean para salvarlos de su ignorancia. De repente, todos queremos salvar a todos; así de buenos somos, siempre pensando en el bienestar del prójimo... ¿No?

A estas alturas he dicho cosas que pueden hacerte dudar si estoy defendiendo a los ateos o estoy defendiendo a los cristianos; ninguna de los dos, no se trata de esto, así que empieza a borrar el partidismo que esta publicación podría insinuar. No estoy en contra de uno o de otro, estoy en contra del ateo fanático y del cristiano fanático (y del fanático de Apple y del fanático de Android, y del fanático de equipos de fútbol como el América y del fanático de las Chivas; o del Real Madrid y del Barça)

Lo interesante del fanatismo es que no discrimina, le entra a todo y a todos. No importa qué creas, a qué partido político sigas, a qué equipo de fútbol, si eres ecologista o no, no importa tu preferencia sexual; a todos les alcanza el fanatismo. 

Hay cristianos fanáticos que nos asustan e indignan a los que somos cristianos. Hay ateos furiosos que se creen superiores a los creyentes de alguna religión porque ellos ven sobre la niebla que cega a muchos. Hay aficionados a un club de fútbol que su habitación parece el santuario de su equipo; y que van a un estadio a pelearse a golpes contra aficionados contrarios. Hay homofóbicos; y también hay gays que persiguen y condenan a los homofóbicos como si estuviéramos en Salem y vieran a una mujer con un gato negro. 

En todos los frentes hay fanáticos. Así como hay machistas en cualquier género, hombres o mujeres. El problema no es en qué creas, sino que tan enfermo te pone eso. 

Así que no existe tal cosa como “el fanático bueno”, eso es un oximoron. El fanático es malo por definición. Y el fanático también es evangelista por vocación. Una persona normal te cuenta porqué le gusta el teléfono que usa, un fanático trata de mostrarte que él o lo que él tiene es mejor, y si eres como él, tu serás del club de los inteligentes. 

El fanático cree que tiene la verdad en sus manos, para él no hay medias tintas o escalas de grises; él tiene la verdad y si no coincides con él, estás mal. 

Tan fácil que es evitar caer en el fanatismo. Tan fácil que es aceptar que todos tenemos pasados distintos que definen nuestro presente. Tan fácil que es aceptar que no tenemos la verdad absoluta. Tan fácil que es aceptar que nuestro político favorito, o nuestro equipo, o nuestro teléfono tiene cosas malas como los otros. Tan fácil que es aceptar (como creen los científicos de verdad) que nadie puede estar absolutamente seguro de algo. Tan fácil que es aceptar que lo que nos hace únicos es lo que nos hace distintos. Tan fácil que es aprender de nuestras diferencias y celebrar nuestras coincidencias. 

El mundo empezará un conflicto global cuando la gente esté totalmente segura de tener la verdad. En el momento en el que se imponga que todos debemos hacer y pensar igual, allí se acabó nuestro planeta. Años de crear y ver caer civilizaciones no nos han enseñado que la mejor manera de lograr la paz, es tomando lo mejor que la experiencia ajena puede darme y dar lo mejor de mi. 

Si tú que me lees eres un fanático, te doy un tip para llevar a todos a tu redil: Muéstrales que tu estilo de vida (sea cual sea) te hace mejor persona. No les grites que son ignorantes, no twittees con sarcasmo, no mires hacia abajo a las personas, no hagas comentarios atrevidos en facebook (y tú solito le des like a tu comentario... En primera es ridículo; en segunda suponemos que te gusta tu comentario, es innecesario que le des like), no juzgues severamente a los demás. Atrapa las abejas con miel, no con una red. En la medida en que la gente vea que eres feliz siendo como eres, ellos querrán ser como tú. 

Todo con equilibrio, puedes platicar tu forma de ver el mundo, incluso debatir con argumentos; pero nada de absolutismo. Por el amor de Dios, en pleno siglo XXI, seamos personas civilizadas.

martes, 12 de noviembre de 2013

¿SABES CRITICAR LAS PELÍCULAS?


Después de dos semanas de padecer los efectos del virus de la varicela... Sigo con estragos. Afortunadamente no me pegó tan duro como a otros, he escuchado historias de terror donde es una agonía el atravesar por esta enfermedad; para mí no lo fue tanto, tal vez por las vacunas de niño, tal vez porque ... No sé... Corrí con suerte.

Vamos al tema. 

A todos nos gusta ver películas ya que a todos nos gusta escuchar historias. Las películas son como la música, necesitamos de ellas para que afloren emociones que en estado normal no se exponen fuertemente. 

En general, todos tenemos grados de criterio para decir si una canción o una película es buena; pero todos nos hemos topado con expertos en la materia que hacen pedazos la canción o película que le encanta a todo el mundo. Cuando estos expertos nos explican por qué una película es buen o es mala, vamos entendiendo un poco más de cómo calificar estas producciones. En muchas ocasiones no sabemos de lo que nos hablan estos expertos, se clavan tanto en conceptos técnicos que solo le sigues la corriente. 

Yo no soy un experto en cine (ni mucho menos), pero por culpa de un maestro de cómic, ahora soy paranoico de ello.

Estaba en Madrid y Kenny Ruiz me daba la clase de cómic. En esta clase no aprendíamos a dibujar, sino a narrar correctamente una historia; más adelante en el curso aprendíamos a hacer una historia propia, y durante todo eso, aprendíamos lo esencial para hacer un guión. Antes de empezar la clase, el profesor se echaba una letanía crítica de la película que vio el fin de semana anterior. Para la mayoría de compañeros, ese monólogo solo era una pérdida de tiempo que le robaba espacio valioso al aprendizaje, pero lo que no entendían era que Kenny nos estaba dando las pautas para poner en práctica lo aprendido y lo que íbamos a aprender en clases. 

Esta información, unida a mi carrera de diseño gráfico, me hizo no volver a ver las películas de la misma manera; en cierto modo me las arruinó; y como soy un resentido de la vida, voy a intentar arruinártela a ti. 

No soy un experto (como he dicho antes), pero si sigues estas pautas, podrás ver a través de los efectos especiales, los chistes y las batallas aparatosas, y descubrir si la película es buena o solo es un “caramelo mental”. 

Mis pautas son las siguientes: Fotografía, Guión y narrativa.

FOTOGRAFÍA

Se trata de lo visual. Podría clavarme en asuntos de encuadre, ley de tercios, color, profundidad, flujo de lectura y cosas que no llevarían a nada; así que solo te digo que si una película la ves bonita, ya es buena en este aspecto.

¿Qué es “ves bonita”? Significa que si detienes la película en cualquier momento, y tomas la imagen que se vea en la pantalla, podrías tenerla como papel tapiz de tu computadora o teléfono móvil por lo bonita que es. 

Esto va más allá, es muy técnico, pero nos podemos quedar con esto. 

GUIÓN

Aquí también hay mundo para explorar, pero vayamos a algunos puntos claves:

Se espera que los personajes evolucionen a lo largo de la película. Si pasan toda la historia y no crecen de alguna manera, no es buena. Por ejemplo, en “Mi villano favorito 2”, Gru no cambia, es igual al inicio y al final de la película, solo se enamora... Pero eso no es cambiar. Es un mal guión. Puede ser que estés pensando “pero es una película para niños, no seas estricto”, pero la película de Disney de Hércules también es para niños y tiene un guión muy bueno. 

Se espera que la película sea congruente consigo misma. Por ejemplo, si Harry Potter tiene un hechizo para viajar en el tiempo (que lo tiene), pues que regrese en el tiempo para evitar que maten a alguno de sus amigos. Si solo usan ese recurso del viaje en el tiempo cuando le conviene al escritor para que la historia se desenrede o se enrede más; está cometiendo un error de guión. 

El concepto “deus ex machina”. Si para que se resuelva la historia tiene que pasar algo milagroso y fuera de las posibilidades de la historia misma, entonces es un mal guión. Por ejemplo, el malo de la película está apunto de matar al protagonista y de la nada, misteriosamente se va la luz y el protagonista puede escapar. Esas “súper casualidades exageradas” son un recurso muy barato y arruinan la historia.

Los malos deben tener razones de peso para ser malos, no solo ser malos por el gusto de serlo. Y también los buenos deben ser buenos por alguna razón de peso. Cuando veas una película, pon en entredicho si los personajes en realidad tienen motivos para hacer lo que hacen. 

Si pasan 5 minutos y la película no avanza, te están tomando el pelo. Si solo ves escenas chistosas, o de acción, o secuencias que no aportan nada a la historia; entonces te están dando caramelos mentales para que te rías, o te emociones, o llores y digas inconscientemente: “Me divertí mucho” o “me emocionó mucho” o “Esa película me llegó, hasta lloré”. Que te provoquen emociones, no significa que haya un contenido; y ese punto es aplicable también al amor. 

La película debe enseñarte algo, son historias con moraleja. Muchas veces el mensaje es claro, en otras ocasiones hay mensajes secundarios escondidos que valen la pena descubrir. Si bien las películas las ves para entretenerte y ya, en realidad puedes tomarte el tiempo para analizarlas y tratar de exprimir lo visto para aprender. De hecho, si durante la película vas encontrando los mensajes y situaciones donde puedes ser empático, la película cobrará una dimensión más profunda y la disfrutarás más.  

NARRATIVA

Algo simple; si decae tu atención en la película, entonces es una mala narrativa. Una buena historia te mantiene atento, así se trate de 20 minutos sin diálogo, como en Wall-e o en Up. 

Una historia perfectamente narrada no necesita diálogo, se entiende todo con las acciones y expresiones de los personajes; como en el corto de Disney ganador del Oscar: “Paperman”.

Si los personajes tienen que hablar para explicarte lo que sucedió, lo que sucede o lo que va a suceder... Es como si en una viñeta de cómic hubiera puro texto en vez de dibujos. Para escuchar a los personajes narrando la historia, mejor lee el libro en vez de ver la película. 

Fin.


Creo que con esto basta, si sabes de películas notarás que hay muchos aspectos más que no expuse, pero a los mortales esto nos es suficiente. Pon a prueba estos puntos en la próxima película que veas. 



martes, 5 de noviembre de 2013

DESCANSO POR ENFERMEDAD

Hola a los miles de lectores que llegan a mi blog cada vez que hay una publicación nueva... no, no es cierto, es raro que una publicación llegue a mil. 

Esta quincena no hay publicación porque estoy enfermo de varicela. Así es, no me dio varicela de niño y ahora de la nada, la padezco. Afortunadamente estoy librándola bien,  hubieron dos días de agonía, pero ya la tormenta pasó y ahora me siento mucho mejor y el ciclo de la enfermedad avanza rápidamente. 

Hola a mis 2 lectores misteriosos rusos. ¿En Rusia hay varicela? Ojalá que me respondan. Nunca me responden. 

Bueno, para compensar, espera la próxima semana la publicación nueva; ya estaré de ánimo y con más tiempo disponible para escribir. 

Ahí te ves.